Mercedez Mendoza Suasti
Las hermanas Mendoza Suasti vivieron una infancia muy singular. Empezaron a cantar cuando tenían cuatro y siete años respectivamente en casa, ya que su padre era amante de la música
CANTANTE
Nace en Guayaquil, el 10 de mayo de 1927. Su hermana, Laura Eulalia Irene, nació tres años antes; sus padres fueron José Mendoza y María Suasti. Las hermanas Mendoza Suasti debutaron como aficionadas en el teatro en 1932 y empezaron a cantar cuando tenían cuatro y siete años. En 1941 son contratadas por la RCA Víctor y poco después Radio Quito las tiene como artistas exclusivas. Han recibido varios reconocimientos: cinco veces por el Congreso Nacional, el Municipio de Quito, Gobierno Nacional e instituciones del país. Tienen más de 60 años de vida artística, han grabado alrededor de 1000 canciones y les han otorgado 6 discos de oro por altas ventas con la interpretación de pasillos.
EL LEGADO FEMENINO DEL PASILLO
Se podría decir que son la representación femenina del pasillo en el Ecuador. Nos referimos a las reconocidas hermanas Mendoza Suasti.
En esta ocasión, y desde su acogedor hogar, ubicado en la ciudadela Nuevo Espejo (Quito), Mercedes Olimpia nos cuenta una parte de la historia, vida y trayectoria de este recordado dueto musical, integrado por Laura Eulalia Irene, quien nació en Quito el 14 de marzo de 1924 (primera voz) y por Mercedes Olimpia, quien nació en Guayaquil el 10 de mayo de 1927 (segunda voz). Su padre fue José Mendoza y su madre María Suasti. En la actualidad, Mercedes tiene 85 años y dice que están alejadas de sus apreciados escenarios por cuestiones de salud.
Las reconocidas artistas se han radicado en la capital porque aquí se les abrieron las puertas al éxito. Mercedes Olimpia estudió la secundaria en el colegio Simón Bolívar y se graduó en corte y confección. Ella tiene tres hijos y doce nietos. Su hermana Laura posee una larga descendencia, ya que tuvo 10 hijos y 30 nietos. "A sus bisnietos ya no les puedo contar porque son una infinidad; mi hermana tuvo mucha familia porque es bien devota", expresa Mercedes con una sonrisa picaresca.
Las hermanas Mendoza Suasti vivieron una infancia muy singular. Empezaron a cantar cuando tenían cuatro y siete años respectivamente en casa, ya que su padre era amante de la música y conformaba un dúo (como aficionados) con el compositor ibarreño Luis Sánchez Peñaherrera; autor del pasillo De conchas y corales.
Mercedes Olimpia cuenta que la carrera artística de las Mendoza se inicia cuando, siendo niñas, su padre las inscribió en un concurso de cantantes aficionados en la Radio Quito: "Allí teníamos como jurado a Aníbal Granja, Carlota Jaramillo, entre otros". Mientras el concurso transcurría, las pequeñas niñas se adueñaron del corazón de los radioescuchas. Por ello, en este medio de comunicación permanecieron en largas y fuertes temporadas, hasta que obtuvieron el primer lugar. 'Esa fue una gran sorpresa y la entrada a nuestro éxito musical'.
En 1940 se hacen profesionales; al año son contratadas por la RCA Víctor, compromiso que firma el papá porque eran menores de edad; la primera canción que grabaron fue el pasillo Cariñito santo de Gonzalo Moncayo y el albazo Si el destino me aleja, con el acompañamiento de Los Nativos Andinos, para luego ser contratadas por Radio Quito como artistas exclusivas.
En adelante han logrado poner solo éxitos en el mercado discográfico ecuatoriano, pues han trabajado para las mejores marcas del país. "Amábamos nuestra música, ofrecíamos al público nuestro corazón y cantábamos lo que ellos pedían", expresa la artista y añade que "nosotras no cantábamos con pistas, sino con las guitarras”.
En su historia musical, han grabado 100 discos de larga duración (long plays) y 200 discos pequeños: "Hemos cantado un sinnúmero de canciones, empezamos duro y aprendimos". Por este esfuerzo, las hermanas han viajado a Estados Unidos para ser parte del Festival del Pasillo. "Esto es un lujo ya que sólo les llevaban a los mejores artistas de la música ecuatoriana", dice Mercedes.
Entre música y recuerdos, se escucha una voz inesperada. Es su sobrina Lupe Romero (hija de Laura), quien anhela reconocer el éxito de su tía: "Me siento orgullosa de tener una tía que ha dado éxitos al país, conjuntamente con mi madre. Son, han sido y serán, lo mejor de este país".
Fuente : pichinchauniversal.com.ec
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